Ya no me queda inspiración
No me sobran las ideas,
Apenas algún recuerdo
Y un vaivén de dolor
Ya no te escribo canciones ni poesías
Porque aunque quiera, no me queda inspiración
Solo una sombra y herida
De lo que eras conmigo,
De lo que era yo con vos.
Y así el tiempo va pasando volviendo inerte mi corazón
Porque tu recuerdo enfría la sangre de mis venas,
Porque la realidad aplastó la ilusión.
Y no te miento cuando te digo
Que ya no me queda inspiración
Porque fuiste mi duda y mi certeza
Y ahora sos solo un adiós;
Porque sos quien me volvió descreída,
"Quien curó esa ridícula obsesión,"
Esas estúpidas ilusiones
Que alguna vez tuve con el amor.
Lanterna dos afogados - Herbet Viana y Gal Costa
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Qué linda poesía! Me gustó mucho. Besotes!
ResponderEliminar